Hoy quiero enseñaros uno de los
GURI-PROYECTOS más bonitos que he hecho (o al menos eso me parece a mí).
Tengo que reconocer que he tardado
bastante tiempo en darle forma, pero creo que la espera ha merecido la pena.
Gracias a Dios cuando Bego me pidió un
quietbook para Mateo, Mateo era muy enano, así que aunque he tardado un montón
en terminarlo, Mateo sigue suficientemente pequeño como para disfrutarlo.
Os voy a enseñar el librito página a
página.
En la primera página Mateo tiene que ordenar las letras de su nombre.
En la primera página Mateo tiene que ordenar las letras de su nombre.
En la segunda página Mateo tiene que
poner cada forma en su sitio correspondiente, ayudándose también del color.
Las dos siguientes páginas son muy
parecidas. En una vemos a un gato y en la otra a un perro. Uno y otro tienen un
collar, que se puede abrir y cerrar para colgar y descolgar adornos. Cada uno
tiene un tipo de cierre.
La siguiente página es de números. Mateo
tiene que contar las guindas que tiene cada pastel y colocar la parte de arriba
en la parte de abajo que lleve el número correspondiente al número de guindas
que tiene el pastel.
En las dos siguientes páginas Mateo puede
poner y quitar manzanas y naranjas del árbol y guardarlas en sus bolsas. Además
podrá jugar con los rayos del Sol, poner y quitar la nube con un botón y mover
las libélulas, la mariposa y las flores, ya que todas llevan velcro.
La próxima página sirve para que Mateo
aprenda a atarse los cordones (todavía le queda un poquito grande al pobre).
Y la siguiente sirve para que Mateo
aprenda a tender la ropa (seguro que esto a Bego le parece una buena idea).
También tiene una flor que se quita y se pone con un snap.
La siguiente página es una granja, que
lleva en su interior 5 marionetas de dedos de animales de granja.
La próxima página es una huerta. En esta
página se pueden recolectar tomates y zanahorias. Además se puede jugar con el
espantapájaros y quitarle y ponerle los pantalones.
En la última página hay una rana glotona
a la que le encanta comer moscas. Como veis, la boca tiene una cremallera y las
moscas se enganchan y desenganchan de la lengua de la rana con corchetes.
Como os decía, aunque me ha costado
sacarlo adelante, ha sido un proyecto súper bonito con el que he disfrutado un
montón.
Os dejo de despedida un vídeo.
Que disfrutéis de este súper puente. ¡Los
GURITOS y yo nos vamos de viaje!